Ritmos circadianos para la preparación del EIR:
encuentra tu horario ideal

Desde LO+EIR te traemos una de las claves más destacadas y decisivas para triunfar en la preparación de tu examen: los ritmos circadianos. Aprende a identificarlos y diseña el horario de estudio que tu cuerpo necesita.

Qué son los ritmos circadianos

Cada 24 horas nuestro cuerpo cumple un ciclo natural. Eso sí: lo hace a su propio ritmo, según las características de cada persona. Son los llamados ritmos circadianos. Cambios físicos, mentales y de conducta que rigen nuestra actividad diaria.

La luz y la oscuridad son los principales factores de influencia que marcan el inicio y el fin de estos ciclos, pero no son los únicos. La alimentación, el ejercicio y el estilo de vida en general también resultan determinantes para la demarcación de estos ritmos y sus variaciones.

A su vez, los hábitos adquiridos y la edad también influyen directamente sobre los ritmos circadianos. Todo ello es objeto de estudio de la cronobiología: una disciplina que puede ayudarte a organizar tus tiempos de estudio. Veamos por qué.

Qué es la cronobiología y los relojes biológicos

La cronobiología ha llegado a una importante conclusión: no todos los individuos siguen los mismos ritmos circadianos. Si bien existe una tendencia a la sincronización con los horarios naturales de luz y oscuridad, según el momento en el que cada persona se encuentra más activa, se observan tres cronotipos destacados: los matutinos, los vespertivos y los intermedios. Identificar el tuyo adecuadamente puede ser la clave definitiva para fijar tus franjas de estudio.

Cómo influye tu cronotipo en tu rendimiento académico

Los matutinos, conocidos popularmente como alondras y conformados aproximadamente por un 20% de la población, se levantan y se activan muy temprano por la mañana. Su nivel de actividad es óptimo durante el día y, a la llegada del anochecer, se sienten cansados.

Por su parte, los vespertinos, conocidos popularmente como búhos y conformados también por un 20% de la población, mantienen el ciclo opuesto: se acuestan pasada la medianoche y se activan hacia el mediodía, ya que su nivel óptimo de actividad se sitúa pasada la mediatarde. La población general, el restante 60%, se sitúa en un cronotipo intermedio, en el que las diferencias en cuanto a picos de actividad no son tan extremas y presentan una tendencia a la adaptación mucho mayor.

Este hallazgo tiene repercusiones directas en lo que a los hábitos de estudio se refiere. Y es que lo que la cronobiología pretende decirnos es claro: debemos hacer coincidir nuestro reloj interno con nuestro comportamiento y nuestros patrones diarios de actividad para encontrarnos mejor y alcanzar el máximo rendimiento.

De esta forma, desde LO+EIR te recomendamos adaptar tu calendario de estudio a las franjas horarias que sean más productivas para ti según tu cronotipo. Pues más efectivo que obligar a madrugar a los vespertinos o hacer que las alondras estudien hasta la medianoche es reconocer nuestras propias necesidades y adaptar el calendario a ellas.

Respetar tu cronotipo, junto con una buena calidad de sueño, una dieta equilibrada y un poco de ejercicio, hará que llegues a tu examen EIR en las mejores condiciones. ¡Mucha suerte!

¿Conoces la academia?

Estas son nuestras herramientas:

Av. del Dr. Severo Ochoa, 47

28100 – Alcobendas (Madrid)

Horario de atención: de 9 a 19 h.
Opinión: 4,8/5

contacto
Social media :

Copyright © 2023